miércoles, 28 de septiembre de 2011

Gracias a vosotros ya no volveré a caer en la misma piedra.

Gracias a todos aquellos que una vez dijeron que yo era fundamental en sus vidas y acabaron echándome de ellas.Gracias a aquellos que una vez dijeron que estarían a mi lado siempre, y a la primera barrera me abandonaron.Gracias a aquellos que dijeron que “sin ti no hay mí”, y ahora andan por ahí felizmente con sus “mí”. Gracias a todos aquellos que llevan toda la vida a mi lado, y todavía no tienen la más remota idea de qué tipo de persona soy, todavía dudan de mí y de todo lo que sería capaz de dar por ellos.Gracias a todas esas personas que no se ponen en mi lugar, que no entienden, o no quieren hacerlo. A todas esas personas que me han abandonado ahora, cuando más les necesitaba, cuando yo aún, estoy para ellos, a pesar de todo. A todos vosotros, los que ya no me acompañan, los que pensé que siempre estarían, les doy las gracias, por hacerme aprender de los errores.


viernes, 16 de septiembre de 2011

Algo que ya sabes, algo que ya saben.

Te quiero. Lo sé. Lo sabes. Lo saben. Te quiero. Ya no hay ninguna escusa, se me acabaron los argumentos. Te quiero, y punto. Ya no es un "me gustas", es que te quiero. Quiero compartir cada momento contigo, quiero ser la primera en escuchar una gran noticia tuya, quiero poder ayudarte en tus peores momentos, quiero ser la persona con la que sueñas cada día, quiero poder sentir tus caricias, quiero que me abraces fuerte, quiero poder mirarte durante horas.... Podría decir un millón de cosas, porque quiero estar siempre a tu lado. Sé que "siempre" es mucho tiempo, y que todo tiene su final. Pero quiero poder romper las reglas, y que no se acabe nunca. Me duele verte abrazando a muchas otras chicas, pero me invade la felicidad cuando me abrazas a mí. Ya no hay nadie que se interponga en mi camino. Ahora todo depende de mí. Hace apenas un año ni te conocía, y ahora has cambiado completamente mi mundo, y sin tí, este mundo está vacío. Todo es cosa de dos, de los dos. Sé que me has querido, y espero que me sigas queriendo como algo más que una gran amiga. Solo me falta decirte una cosa: te esperaré.


jueves, 15 de septiembre de 2011

Solo les necesito a ellos.

Es algo más que salir de fiesta, es mucho más que una grandísima noche. Eso no puede llegar a ser posible si no les tienes a ellos, a tus amigos, con quien compartir esos bailes, la locura, risas, todo. A veces lo pienso, y sigo pensando. A quienes les puede la avaricia, siempre acaban perdiendo. He tenido muchos amigos, que con el tiempo han ido desapareciendo. Algunos han durado años, y otros, en cambio, un par de meses. La amistad y los buenos momentos no se miden por el tiempo que han durado, si no por la calidad que han tenido. Porque las mejores cosas siempre se guardan en los frascos más pequeños. Antes me daba igual, no me importaba nada, pero a medida que pasa el tiempo, es cuando rectificas, y te das cuenta de que la gente es realmente egoista. Ahí es cuando miras solamente por tu felicidad, y después, por la del resto.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Cada día se hace más complicado.

Todo es muy difícil, y tengo que arriesgarlo todo para conseguir lo que quiero. ¿No te das cuenta de que cada cosa que hago es por y para ti? Cuando has querido algo, he sido la primera en dártelo. Cuando has necesitado consejos y apoyo, he estado ahí para animarte. En todo este tiempo han pasado muchas cosas. Empezaste siendo un conocido más. Poco a poco, conseguí tu confianza. Hasta que lograste mi amistad, y sin darme cuenta, alcanzaste mi corazón. Empezaste con una mirada, seguida de una sonrisa. Luego comenzaron los abrazos, esos que soy incapaz de olvidar. Empecé viéndote tan solo unos segundos, a estar horas a tu lado. Me dijiste que el tiempo decidirá, y sigo esperando un poco de suerte para conseguir esa meta, ese objetivo y deseo de estar a tu lado.



Recuerda estas palabras.

No entiendo por qué es tan difícil expresar todo aquello que sientes. Sé que puede parecer algo extraño, e ilógico. Pero cuando tienes a la persona que más quieres en frente de ti, le miras a los ojos, y te habla, y tú finges estar pensando, cuando en realidad te bloqueas, y no te salen las palabras. En este mundo, en este tiempo, en este lugar, y en este momento, existe una persona que ha logrado ser alguien especial para mí. Y me atrevo a decir que es la única que lo ha conseguido, sin hacer apenas nada. Una persona que a lo largo del tiempo he podido conocer, admirar, confiar, y sobre todo he podido querer. Al principio sentí que sería algo pasajero, pero después me di cuenta de que no era así. Cometí cientos de errores, no demostraba que le quería, y dejé escapar oportunidades. Siento que hubo cierta confusión en él, ya que sólo me atrevía a mirarle y a sonreírle, a pesar de hablarle cada día. Solo quiero que sepa que la mínima cosa que haga, me hace feliz, que cada abrazo es un mundo diferente, y que cuando se enfada, me hace sentirme mal. Me duele saber que no crea que le quiero demasiado, pero no tengo por qué enfadarme, ya que nunca fui capaz de decirle lo que sentía. Tal vez ya lo sepa todo, o quizás no sepa nada. En fin, sólo quería recordarle que le quiero, y, como ya le dije hace tiempo, le esperaré.


Con el tiempo se aprende.

Aprendí que los amores pueden terminar en una noche, Los grandes amigos pueden volverse grandes desconocidos. Que grandes desconocidos pueden volverse mejores amigos. Que nunca acabamos de conocer a una persona. Que el ''nunca más'', se cumple, y el ''para siempre'', acaba. Que el que quiere, puede, y lo consigue. Que el que no arriesga no pierde nada. Que el físico atrae, pero la personalidad enamora. Aprendí a no creer en las promesas, a no confiar en casi nadie y a contar con los dedos de una mano a quien de verdad siempre estuvo a mi lado.



Se merecen todo, y más.

Aunque parezca mentira, la amistad es dificil de cuidar y sobre todo, de mantener. Cuando era pequeña, bajar a la calle con ese grupo de amigos del cole, era lo único que me hacía feliz. Al principio, todo era magnífico, hasta que llegaron los problemas y las discusiones. A medida que pasa el tiempo, te vas dando cuenta de que no se puede confiar en todo el mundo, porque a la mínima... ¡PUM! Ya no te puedes esperar nada de nadie. Quizás sea por que espero mucho más de las otras personas, pero en realidad, ellos no harían lo mismo por mí. Hay una frase que dice "La gente se da cuenta de lo que tiene hasta que lo pierde", y sí, es cierto. Cuando te alejas, y se va notando la distancia, es cuando te echan en falta, pero tú ya no estás ahí, demasiado tarde, te has ido. Luego, van entrando nuevas personas en tu vida, y la misma historia, hasta que se alejan, y desaparecen. Y de repente, cuando menos lo mereces, pero cuando mas lo necesitas, aparecen, sin decir nada, y con los brazos abiertos. Esas personas son las que se merecen mi atención, mis consejos, mi compañía... se merecen todo y más. Porque gracias a ellos me puedo divertir, puedo contar con ellos, puedo reir, puedo llorar... porque sé, que haga lo que haga, seguirán estando ahí... lo sé.

sábado, 9 de julio de 2011

Haz que se pregunten el por qué de tu sonrisa.

Me han dicho que recibir con una sonrisa a todo el mundo, incluso a esa gente que te mira de pies a cabeza, les hace felices. Me dijeron que sonriendo puedes sentirte la persona más feliz del mundo, que la felicidad es algo grande, pero que se consigue con las cosas más pequeñas, incluso de las personas más insignificantes de tu vida, pero también de las más importantes. Me contaron que la felicidad es algo nuestro, y solo nuestro, es algo que nada ni nadie te lo puede quitar ni cambiar, que es algo que siempre está presente, aunque no la consigas ver ni tú mismo. Ese pequeño gesto de mover un milímetro los bordes de los labios hacia arriba, puede hacer felices a un millón de personas, incluso a ti mismo.


lunes, 13 de junio de 2011

Vienes, te vas, desapareces, y regresas.

Recuerdo el momento exacto cuando me empezaste a hablar. Comenzó como una amistad, hasta que descubrí que te quería para algo más que un amigo. Todo era perfecto. Yo misma lo he dicho, era. Después, sin razón ninguna me abandonastes. Dejaste de hablarme, ni si quiera te atrevías a mirarme a los ojos, ni mencionar un simple hola. No sabía qué pensar, ni qué hacer. ¿Debía olvidarte? Esa era la solución que mis amigos me dieron, pero en el fondo, a pesar de todo, yo sabía que eras tú o ninguno, y algo dentro de mí me decía que siguiera intentándolo. Ahora, regresas, con tu sonrisa y tus "qué guapa ibas hoy", me hablas cada dos segundos, cómo antes, cómo siempre. ¿A qué se debe?


domingo, 12 de junio de 2011

Volviendo a las andadas.

Por mucho que lo intente no consigo entender nada. ¿A qué juegas? Te odio por hacerme feliz y después ignorarme, aunque lo niegues. Odio tu increible sonrisa, porque me pasaría horas mirándola, odio tu ojos verdes, esos tan bonitos que me hacen perder la cabeza, odio cada palabra que sale tu boca, porque odio esa voz tan dulce que tienes, odio cuando me tocas el pelo, porque me sonrojas, y odio cuando me dices lo guapa que voy, porque sabes que me encanta que me lo digas. Lo odio. Todo es como una montaña rusa. Al principio subimos a gran velocidad, y traspasamos las nubes. Luego descendió, tanto que llegué a tocar el suelo. Ahora está volviendo a subir, y no te niego que me encante, pero lo sigo odiando. Lo odio porque tengo miedo de que vuelva a caer en picado, sin control. ¿Pero qué estoy diciendo? Si yo jamás podría odiarte... Soy de las que piensan que no hay nada imposible, pero ¿odiarte? eso es una excepción.


miércoles, 8 de junio de 2011

Cómete el mundo.

Levántate y ponte guapa, para sorprender a los que te conocen, y, por qué no, a los que no te conocen también. Sorprende al mundo con tu belleza. Siéntete la mejor de todas, y listo. Cuando haya un rumor incierto sobre ti, no te preocupes, y ves con la cabeza bien alta. No mires ni te fijes en aquel que no se lo merezca. Fíjate en detalles, pero no te obsesiones con señales. Infórmate de todo lo que pasa a tu alrededor. Y olvídate de tus enemigos, no merecen ni si quiera tu atención. ¿Qué? ¿Perdona? No te he oído, es que, a palabras necias, oídos sordos. Cuando cometas un error, reconócelo, y demuestra que te arrepientes, pero sobre todo, aprende de ellos. ¿Y qué hacer con tus amigos? Da todo por ellos. Miente si tienes que mentir. Arriesga. Perdona, todo el mundo merece otra oportunidad. Ayuda. Escucha todos y cada uno de sus problemas. Ríe, y disfruta de su compañía, y ellos lo harán por ti.


Porque hay cosas que nada ni nadie podrá cambiar.

Por las malas cosas que se repiten, por cada tropiezo con una misma piedra, por la mala memoria, por los errores cometidos, por las miradas perdidas, las miradas con significado propio, por cada abrazo dado, por los minutos perdidos, por el tiempo regalado, por el dolor, por la ignorancia, por las buenas intenciones, por las mentiras, por el interés, por las falsas amistades, por las tardes aburridas, por las tardes de risas, por la felicidad, por el amor, por no saber querer, por no demostrar lo que siento, por intentarlo día sí y día tambien, por luchar por los sueños, por llorar cuando no debo, por sonreír aunque duela, porque hay cosas que nada ni nadie las podrá cambiar.



Quiero tenerte aquí, conmigo.

Parece totalmente increíble lo mucho que me puede llegar a importar una persona. Me hago miles de preguntas sin respuesta, porque ciertamente nadie las puede responder, me deprimo si él está mal, y su felicidad es parte de la mía. Es fascinante y a la vez insoportable el tenerlo la mayor parte del tiempo rondando por mis pensamientos. Quiero tenerle aquí, conmigo. He de confesar que tambien siento miedo, por muchos motivos. Tengo miedo de perderlo, de que no le guste, o de que me lo quiten. Por mucho que intenten entenderme, no lo entenderán, es algo inexplicable, jamás lo harán.


martes, 7 de junio de 2011

Gracias a ellos tengo esta sonrisa.

Por mis amigos yo doy cualquier cosa, les defiendo con uñas y dientes si hace falta. No soy la clase de amiga que te va a llamar cada dos minutos, ni te va a dar un abrazo cada vez que te ve. Pero soy de las que saben escuchar, de las que se tragan todos sus problemas, y les ayudo a superarlos, a pesar de que no son mios. A la hora de la verdad es cuando te das cuenta de quienes merecen la pena, y quienes son un simple pasatiempo. Me han utilizado muchas veces, y juré que no volvería a pasarme de nuevo, que no tropezaría por tercera vez con la misma piedra de siempre, esa piedra que se interpone en mi camino cuando más liso está. Gracias a ellos he superado todos los baches, piedras, y obstáculos, y gracias a ellos soy cada vez más fuerte. Por ellos tengo esta sonrisa, por sus tardes llenas de risas, por cada conversación, por cada baile, por cada grito, por los momentos que recordamos, y los que nos quedan por vivir. Son muchos motivos difíciles de explicar, pero son todos muy importantes. Muchos se consideran amigos, pero pocos se limitan a serlo de verdad.


Me dijistes que los trenes sólo pasan una vez, pero, ¿por qué no dos? ¿por qué no empezar de nuevo? Me gustaría volver al momento en el que te conocí. Fue una tarde, a finales de noviembre. Empezamos a hablar cada día, ¿recuerdas?. Poco a poco te ganastes completamente mi confianza, y poco a poco me fuistes robando el corazón. Cada vez que te decía "tengo frío", tú me contestabas "así me entran más ganas de abrazarte". Esas palabras me encantaban, y más si salían de tí. Tal vez, en su momento, no las valoré lo suficiente, pero ahora las echo de menos. O cuando me decías "yo siempre te voy a defender", o "qué guapa ibas hoy". Todo lo que me decías significaba mucho para mí. En ese tiempo vivía en una nube, no me importaba nada más que no fueras tú. Luego comenzaron las miradas, miles de sonrisas, y lo que nunca olvidaré, los abrazos. Recuerdo el primero que me distes, y estoy segura de que te acuerdas del primero que te dí yo, en ese 14 de febrero. ¿Y te acuerdas de cuando me cogistes por detrás y me abrazastes diciendo "qué frío hace"? Fue un grandísimo momento, lo recuerdo como si estuviera pasando ahora mismo. Ahora no puedo estar viviendo en el pasado, ni pensando en el futuro. Pero quiero que sepas y tengas presente que tú has sido, eres, y probablemente serás el único que me ha echo sentir de esta manera tan especial, y que te quiero, y no me importa cuanto tiempo tenga que esperar, porque te aseguro que esperaré, por tí esperaré. Necesito que te des cuenta de que te quiero de verdad, y que otra no te podrá dar lo mismo que yo. Te echo de menos, vuelve por favor.


sábado, 4 de junio de 2011

Toda mi felicidad depende de él

Hay un dicho que dice: "que tu felicidad no dependa de otras personas". Y.. ¿sabéis qué? Que yo no lo cumplo, porque mi felicidad depende totalmente de él. Si me mira, puedo estar el resto del día con una sonrisa, y el día que me ignora, no soy yo, porque siento que me falta algo, me falta él. Sé que no debería de ser así, que mi felicidad no tiene que depender de nada, y mucho menos de nadie. Pero por desgracia, es así, y no lo puedo cambiar. Sabe perfectamente que le quiero, que necesito sus conversaciones, sus miradas, sus perfectas sonrisas, y sobre todo sus abrazos con una dosis de cariño. No caigas en la misma trampa que caí yo, sigue el curso de tu vida, pero sin tener que depender de nadie. Será lo mejor, creeme. No es un consejo, es una orden. Sálvate, ahora que puedes.



jueves, 2 de junio de 2011

Me levanto, como buena luchadora que soy.

Odio sentir que estoy rozando el suelo, y ahora mismo estoy a dos centímetros de él. Pero como luchadora que soy me levanto sin derramar ni una sóla lágrima, con la cabeza alta, aunque con el alma hundida. Le miro cuando tengo la oportunidad de observarle, en silencio, como siempre. Le ayudo siempre que noto que lo necesita, que necesita alguien en quién desahogarse, siempre estoy ahí. Envidio a todo aquel que está a su lado, me gustaría ser yo quien le de conversación. Hago todo lo posible para conseguir su atención, pero lo veo casi imposible. Él, en cambio, me ignora, es como si no fuera nada para él, como si todas esas conversaciones por la madrugada no hubieran significado nada, ni cada abrazo, ni cada beso. Pero yo, como una tonta, voy detrás de su amor. No es que no pueda olvidarle, es porque no quiero hacerlo. Le necesito, y cuando quieres a alguien, y le miras, y algo dentro de tí, te dice "es él", es porque es la persona indicada, está echo para tí. Hemos estado muy distantes estas últimas semanas, pero no dejaré escapar el tiempo otra vez.



miércoles, 18 de mayo de 2011

Piensa en mí y seré inmensamente feliz.

Tengo muchas cosas que decirte. No sé cómo empezar… Creo que debería comenzar diciéndote que te quiero, te guste o no, nunca dejaré de hacerlo. Ya que estoy, te confesaré también que sueño todas las noches con volver a abrazarte. Esto es así, no hay más que hablar, te conocí, inesperadamente, y poco a poco me enamoré. No sé ni cómo ni por qué, pero es la verdad. He estado a tu lado en todo momento, con tus fracasos y victorias, porque tu felicidad forma parte de la mía. Siento acordarme tanto de ti, cuando veo ese recuerdo tuyo, o una foto, pero es que no lo puedo evitar mirar cada día. No sé si tú te acordarás de mí, aunque sea una décima de segundo. Probablemente no, no lo sé. Fui una cobarde, tuve una oportunidad, y la dejé escapar. Espero que algún día me perdones esa cobardía. No sé qué pensarás, no sé si te pasará lo mismo a ti, pero sea lo que sea la respuesta, yo voy a esperar igualmente, estoy cansada de intentar disimular, de ocultar todo esto. Me hiciste feliz, aunque no lo creas. Debes saberlo. Con cada cosa que hacías, yo era inmensamente feliz. Son detalles que a simple vista no son gran cosa, pero para mí, son los detalles más bonitos del mundo. Si en algún momento, tú quieres tenerme, sólo te pediré que grites mi nombre, y ahí estaré.





sábado, 14 de mayo de 2011

Adicta a tí.

Cuando pensaba que todo era imposible, que no te volvería a sentir tan cerca de nuevo, sucedió otra vez. Te llamé, dándote dos golpecitos en la espalda, no quería dejar escapar esa oportunidad, porque son cosas que suceden y no las puedes perder. Te girastes, con una enorme sonrisa que hizo que saliera la mía. Después sentí tus brazos, el latido de tu corazón y tu respiración. No pude evitar darte un beso, en la mejilla, como antes siempre hacía. Ahora solo espero a que vuelva a ocurrir, a que vuelva a tener otra ocasión como esta. Te quiero, y aunque me cueste creerlo, aceptarlo y demostrarlo, es así. Me he acostumbrado a esta adicción a tí.



Intenta, persiste, sigue, y consigue.

Por mucho que luches en la vida, siempre te vas a llevar sorpresas, sean buenas o malas. Te caerás muchísimas veces, pero te levantarás otras tantas. Estarás a tres metros sobre el cielo, o a tres mil. Un día tendrás ganas de fiesta, y otro no te querrás levantar de la cama. Irás un día hacía adelante, y otro hacía atrás. Nada de lo que pasa es inesperado. No hagas otros planes para tu fabulosa vida, porque la vida siempre tiene planes para ti. Las personas que luchan por sus sueños, aquellas que lo intentan día tras día, con la misma ilusión de siempre, las que no pierden la fe, aunque no consigan ver la luz por ningún lado, por aquellas que creen en sus ilusiones y mantienen la esperanza de que algún día se harán realidad, las que luchan, lo intentan, se esfuerzan, y persisten, y siguen, y siguen intentándolo. Porque lo que fácil empieza, fácil acaba. Lo imposible sólo tarda un poco más en llegar, sólo hay que seguir luchando, ese es el secreto del triunfo, no rendirse. Esas personas al final lo consiguen, sí, siempre lo consiguen.


El silencio te da la razón, el tiempo: la felicidad.

Te seré sincera, te necesito. Pensaba que sólo se podía echar de menos aquello que has tenido alguna vez, pero no, vivo atada al pensamiento de perderte sin querer. He luchado mucho, y he sufrido, por tí, por conseguir aunque sea una pequeña porción de tu amor. Te quiero, y debo decírtelo, pero no me siento capaz. Sólo la gente que dice lo que siente consiguen la felicidad. La vida es demasiado corta como para andarse con indirectas, pero vivo con el miedo a escuchar un "yo no", o a perder esta gran amistad. He aprendido tambien que el amor no se busca, se encuentra. Aparecistes hace medio año, y desde entonces, solo tú has ocupado mi pensamiento, has sido el único capaz de hacerme sentir todo esto. Sé que eres tú, o ninguno. Te esperaré el tiempo que haga falta.



sábado, 30 de abril de 2011

Contigo todo es perfecto.

Calla... no digas nada, déjame hablar, quiero decirte algo. Podría empezar diciéndote que eres lo más bonito que tengo cuando miro alrededor, que me importas mucho, desde el primer día que te conocí ya eras alguien especial, y no dudes que pase lo que pase siempre voy a estar a tu lado apoyandote, siempre, ¿vale? Creo que no es necesario que te lo diga, porque ya lo deberías saber. Por cierto, ¿te gusta mi vestido? He debido estar media hora eligiéndolo, y más de una hora frente al espejo, pero creo que ha merecido la pena. Bien.. ¿por dónde iba? ¡Ah sí! Abrazame, fuerte, muy fuerte, me encanta esa sensación de sentirme la chica más afortunada del mundo en un instante. ¿Piensas en mí alguna vez? Porque no sé que has echo, pero yo no puedo sacarte de mi cabeza. Te quiero pedir tambien otra cosa, si lo sientes de verdad, dime que me quieres, dímelo porque yo jamás me atrevería a decírtelo primero. Y ahora, tápame los ojos, que no pueda ver nada, sólo quiero sentirte detrás de mí, apretándome cada vez más junto a tí. Vámonos muy lejos, a ese mundo dónde dicen que todo es... ¿cuál es la palabra? ¡Ah sí! PERFECTO.




miércoles, 27 de abril de 2011

Hazlo tuyo para siempre.

Es por tí, ¿lo entiendes? Todo lo que ago es referente a tí, por tus ojos, tu mirada, tu sonrisa, la forma en la que me abrazabas fuertemente, tu forma de hablar, de escucharme pase lo que pase, de entenderme, de comprender aquello que te digo, tu manera de ayudar, de transmitir una confianza inmensa que no tengo con todos... Y por muy raro que pueda parecer, me atrevo incluso a decir que nunca me había sentido de esta forma. La gente me dice que estoy cegada, cegada de amor, pero no, yo sigo con mis ilusiones, mis esperanzas, porque si quiero algo, voy a por ello, por muy lejos que se encuentre y por muchos baches que puedan haber en el camino. Simplemente los saltaré y seguiré avanzando. Aunque sí que es verdad que una parte de mí me dice que no estoy mínimamente preparada para esto, pero la otra, en cambio, dice que le haga mío, y para siempre. Haces que todo lo que hagas, cada gesto, cada risa, todas tus miradas, cuando me dices qué guapa, cada abrazo, todo... lo conviertes en algo especial, algo inexpicable que hace que pierda la cabeza, y aunque hayan durado segundos, soy capaz de recordarlo durante todo el día.




lunes, 25 de abril de 2011

Esperaré el tiempo que haga falta.

Mezcla de sentimientos, de sensaciones. Ya no sé qué pensar, qué hacer, ni qué decirte para conquistarte otra vez. Y es que por más que lo intento no puedo, ni quiero dejar de recordar esos abrazos que me dabas, porque cada uno era especial. Te aseguro que no he abrazado de esa manera a nadie más, solo a ti. Esos besos, caminar de tu lado, y siempre sonriente por verte tan cerca mío. Te juro que podía tocar la luna solamente dando un salto. Aunque no demuestre casi nada, por mi orgullo y vergüenza, me sentía la chica más afortunada del mundo. Y es que, esas cosas insignificantes, son las que más me hacían feliz, y ahora que no las tengo, las necesito aún más. Me dejo el alma en cada despedida, y así tener luego una excusa para volver. Pero ya no, no sé ni si quiera si te importo, aunque sea lo más mínimo. Seguiré esperando, seguiré estando ahí, por si algún día decides regresar. Porque aunque ahora sea un "no", nadie asegura que un futuro sea un "". No viviré de sueños, sino que los cumpliré e intentaré realizar cada uno de ellos. Porque estoy cansada de soñar, de imaginar y no poder verlo en la realidad. Este será mi plan, mi meta que lograré alcanzar, esperaré todo lo que haga falta, lucharé por todo lo que quiero, romperé las barreras que me impidan hacerlo, y si me caigo, me levantaré de nuevo, y seguiré, no me rendiré por muy lejos que se encuentre esa meta, y por muy imposile que parezca, porque pondré empeño y esfuerzo, y lo conseguiré, algún día...



domingo, 24 de abril de 2011

Dicen que el que tiene un amigo, tiene un tesoro.


Hoy, un día cualquiera, te paras a pensar en todas y cada una de las personas que han pasado por tu vida, esos amigos que en su día te dijeron para siempre, pero… ¿dónde están? Porque yo no los veo aquí. Esos que considerabas tus mejores amigos, los que parecían que te ayudaban, esos con los que te pasabas las tardes hablando, y ahora, simplemente os dirigís un hola. Y de repente, todo da un giro, un gran giro de 180º que cambia absolutamente todo. Por esos amigos y amigas que te traicionaron, que no supieron apreciarte, y se dan cuenta de lo que tenían cuando te vas, por esos a los que querías como a nadie, y cada día les ayudabas y mostrabas su mejor parte, pero ellos en cambio, a ti no, eras un simple pasatiempo, sin más. Y estoy segura de que todos tendrán lo que se merecen, por los que se fueron y luego volvieron, por los que se quedaron, por los que rectifican y te hacen rectificar, por todos, por los errores, y por los aciertos. Todo lo que pasa, que no te gustaría que hubiera pasado, pero ya no se puede hacer nada, porque si el destino así lo quiso, será por algo. En cambio, brindo por esa gente que aprecio, y aunque algunos sean de no hace mucho tiempo, sé que seguirán hay, a lo largo del camino, y ahí es cuando sonríes, cuando te das cuenta de que la amistad no se mide por el número de saludos que das, sino por el número de sonrisas que te pueden sacar al día. 


sábado, 23 de abril de 2011

No abandones tus sueños: vívelos.

Cuando alguien crece, también crece todo a su alrededor. Cuando tratamos de ser mejores de lo que somos, todo de nuestro alrededor también mejora. Eres libre para elegir, para tomar decisiones, aunque solo tú las entiendas. Y tómalas con coraje, sabiendo lo que más te hará feliz,  pero nunca viene mal una cierta dosis de locura. Solo entenderemos la vida cuando no busquemos explicaciones. Entonces todo queda claro. Aprender algo significa entrar en un mundo desconocido, donde las cosas simples son las más extraordinarias. Atrévete a cambiar, desafíate, no temas a los retos, insiste una y otra vez, ten fe, y no te des por vencido, porque puedes perder una batalla que ya parecía ganada. Recuerda siempre lo que quieres. El secreto es no tener miedo de equivocarnos, y ser humildes para aprender. Ten paciencia para encontrar el momento exacto. Y si esto no es suficiente, analiza las causas e inténtalo todavía con más fuerzas que nunca, porque el mundo está en las manos de aquellos que tienen el coraje de soñar, y de correr el riesgo de vivir sus sueños. Ve y lucha.  Nunca dejes de intentarlo, no abandones tus sueños, pues solo así los conseguirás.




Si no arriesgas, no ganas.

Una cosa te diré, siempre hay un 50% de posibilidades, sólo el 50% del rechazo. ¿Entendido? Pero mira el lado positivo, hay un 50% de que consigas la felicidad, tu felicidad, pero eso depende de ti. Y tú, así de tímida, de orgullosa, no dices nada. ¿Y crees que así conseguirás algo? Es mejor ignorar por vergüenza, que atreverse y oír un no por respuesta. ¿Verdad? Y puede que también te quiera, pero no, puede que sea incluso el que más te quiera, puede que te proteja siempre, puede que sea el más importante de tu vida, que sea la persona adecuada para ti, que sea el único que te saca esa sonrísa que te caracteriza, que sea incluso tu alma gemela, pero no, tú siempre fiel a tu orgullo, dejándote guiar por tu vergüenza. Y hay una cosa que nunca falla, te lo puedo asegurar, es un tópico, sí, pero tiene mucha razón, y es que si no arriesgas, no ganas, y si sigues así, no ganarás nada. Tenlo muy claro, y ahora, aplícate el cuento: no te guíes ni por la vergüenza, ni por la cabeza, por favor, si no por el corazón… y conseguirás lograr todo aquello que te propongas y quieras de verdad.




Voy a ver el mundo.

Hoy es el día, sí, ¿sabes que es lo que quiero? Bien, te lo diré de todas formas. Pues principalmente quiero poder liberarme, desatarme, estar por encima de todo, y ser yo, y nada más que yo. Voy a empezar a preocuparme un poco más por mí, porque me he dado cuenta de que si me preocupo primero del resto, no alcanzaré mi felicidad. Hoy, he decidido que voy a ser libre, que jamás nadie me volverá a atar, a encerrar, a no enseñarme el mundo. ¿Y sabes qué? Yo quiero verlo, y en todas sus perspectivas, en todos sus colores, en todos sus aromas, y en todos sus sentidos. Hoy, voy a salir. Puede que triunfe, que gane, que alcanze la felicidad, o tal vez pierda, y me derrumbe, aunque también puede ser que me enamore y esté en el cielo, en un mundo mágico, ¿quién sabe? y te aseguro que lo haré, llueva, granice, nieve, o me hiele. No vuelvo a caer en este juego, en el que la perdedora siempre he sido yo. Quiero conocerte, estoy decidida, ya nadie me para, porque... LIBERTAD, qué bonito nombre tienes.



Vive la vida, pero conmigo.

No hay límite en el tiempo, aunque debes saber que no parará a esperarte. El tiempo sigue, continúa, estés en las nubes o en el suelo, no se detendrá. Nunca es demasiado tarde, ¿no crees? Hay una cosa de la que tambien estoy segura, y esque no hay nada imposible, te lo aseguro. Si estás dispuesto a luchar por lo que quieres, lo conseguirás, creeme. La vida es demasiado corta para ser alguien más, debes ser tu mismo, porque la mayor perfección que existe es mostrarnos al mundo tal y como somos. Adelante, no pierdas el tiempo y te prometo que encontrarás la felicidad. Acuerdate de todos esos pequeños detalles, de cada abrazo, cada mirada y cada una de las sonrisas que la acompañaban, sin motivo alguno. Pero antes, hay otras cosas que debes saber, y lo más probable es que ya te lo hayan dicho, y esque tú vales mucho, asique vive la vida minuto a minuto, sin desaprovechar cada segundo que pasa, y quién se quede a tu lado a lo largo del tiempo, serán las personas que te quieren, y realmente merecen la pena sonreír por ellos. Pero antes, te voy a pedir un favor, un enorme favor: como te he dicho antes, quiero que vivas la vida, pero que la vivas conmigo. ¿te atreves?




La magia de un abrazo.

En ese mismo momento, en esos pequeños segundos que deseas que se vuelvan a repetir con todas tus ganas, cuando te abrazo, desaparece todo lo que tiengo alrededor: lo único que existe somos tu y yo. Sólo me queda pedirte perdón, perdón por no atreverme a acercarme a tí, aunque por dentro sea lo único que quiera hacer. En ese instante me doy cuenta de que eres el único al que debo abrazar el resto de mi vida. Siento tambien algo realmente asombroso,quiero reir, pero también llorar. Me inunda la felicidad por el simple echo de haberte encontrado, de forma inesperada, porque hace apenas medio año eras una persona cualquiera, sin más, pero de repente, te convertistes en una persona indispensable para mí, y te aseguro que lo sigues siendo. A la misma vez, me invade el temor de perderte, sí, de perderte sin tenerte. Se apodera el miedo de mí, y te agarro aún con más fuerzas, para que no te vayas, porque nunca se sabe cuándo te volveré a abrazar. Y a tí, ¿te pasa lo mismo?